Los buceadores acuden a los médicos
para obtener un certificado médico que les indique que son
aptos para la práctica del buceo. ¿Cuál son
los pasos o qué pruebas deben pasar las personas que quieran
bucear?
La normativa española exige un Certificado Médico
de Aptitud al inicio de cualquier actividad de buceo. Algunas normativas
adicionales matizan las características de estos reconocimientos
médicos y cada Comunidad Autónoma las ha interpretado
a su modo y hay diferencias importantes entre unas y otras. En consecuencia,
al preparar el conjunto de requisitos necesarios para hacer el curso
de buceo deportivo, el buceador debe incluir entre ellos el Examen
Médico de Aptitud.
¿Falta algún tipo
de prueba que debiera tenerse en cuenta a la hora de emitirse
este tipo de certificados?
Es muy importante que los buceadores entiendan que la necesidad
de hacerse un Certificado Médico de Aptitud no depende
de una normativa. No se trata de ir a un médico a
que le firme el certificado. Lo que al buceador le interesa
es someterse a un conjunto de pruebas médicas que determinen
si está realmente capacitado para realizar esta actividad
sin sufrir problemas, y que le ayuden a descartar posibles contraindicaciones
o situaciones que puedan provocarle contratiempos a largo plazo.
El número de pruebas a que debe someterse el buceador es
variado y no es oportuno hacer una lista de pruebas recomendadas.
Lo que sí es absolutamente importante e imprescindible
es que la revisión médica sea realizada por un médico
capacitado. Es decir, un médico con conocimientos verdaderos
y profundos de la Medicina Subacuática. No debe olvidarse
que la Medicina del Buceo no forma parte de los estudios básicos
de la carrera de Medicina, por consiguiente los médicos
terminan la carrera sin haber recibido ninguna formación
en Medicina Subacuática. Es necesario continuar luego con
estudios de tercer ciclo, es decir Diplomas, Masters u otro tipo
de cursos superiores realizados necesariamente en Facultades de
Medicina que son la única forma de calificar a un Médico
para estudios superiores.
Después de 25 años
de funcionamiento de DAN EUROPE ¿cuál ha sido su
evolución y hacia dónde camina?
En la actualidad DAN es la institución más importante
del mundo dedicada a todos los aspectos relacionados con la Medicina
Subacuática, la prevención de accidentes o el tratamiento
de éstos cuando se producen. Su objetivo es continuar en
esta línea de crecimiento incorporando estudios de investigación
y actividades de todo tipo. Es importante que los buceadores recuerden,
una vez más, que DAN-EUROPE no es una compañía
de seguros sino que es una institución sin afán
de lucro destinada a la investigación y al desarrollo de
todo tipo de actividades relacionadas con la Medicina Subacuática.
¿Qué recomendaciones
le daría a un buceador aficionado que desea asegurarse?
La primera de ellas es recordar a todos los buceadores deportivos
y profesionales que en España y en casi todos los países
Europeos, los accidentes de buceo están excluidos de forma
explícita de las prestaciones de la Seguridad Social, por
tanto buceadores deportivos y profesionales deben suscribir un
seguro que cubra los accidentes de buceo. Y recuerden que los
seguros de accidentes normales muy a menudo excluyen la práctica
de buceo. No obstante, DAN ha logrado en estos años hacer
entender a las compañías aseguradoras que el buceo
no es una actividad de tanto riesgo como se decía antes
y muchas compañías incluyen ahora el buceo entre
sus prestaciones. Pero cuando un buceador tiene algún accidente
lo más importante no es quién le pagará las
facturas sino donde irá a recibir el tratamiento, qué
tipo de asistencia se le prestará, y si esta asistencia
se va a llevar a cabo de la forma adecuada. Aquí es donde
una central de servicios como DAN-EUROPA ofrece una asistencia
y unas coberturas que ninguna otra institución posee en
el mundo.
¿Y
a un profesional del buceo?
En el caso de un monitor o instructor profesional es necesario
que su seguro incluya no solamente la cobertura de accidentes,
sino un potente seguro de Responsabilidad Civil, puesto que como
resultado de un accidente colectivo puede recibir demandas por
parte de buceadores accidentados, de sus familias o de personas
que puedan haberle considerado responsable de incidentes o accidentes,
aunque estos fueran fortuitos.
¿Cuáles son los motivos por los cuales se producen
más accidentes de buceo?
En la práctica del buceo deportivo el factor humano es
la causa principal en la inmensa mayoría de los casos.
Esto se podría extender a casi el 100% de los accidentes
hasta hace muy poco. En la actualidad la introducción de
las nuevas tecnologías en el llamado buceo técnico
ha puesto en primer plano de nuevo el fallo mecánico como
causa de algunos accidentes graves. En el buceo profesional también
la causa principal sigue siendo el fallo humano pero a medida
que se utilizan sistemas de buceo cada vez más sofisticados
el factor técnico ha vuelto a adquirir relevancia.
¿Cómo ve actualmente
la seguridad en la práctica del buceo?
Puede afirmarse de forma rotunda que el buceo es una actividad
muy segura. El número de accidentes es bajísimo
comparado con otras actividades en las cuales la cifra de accidentes
es mucho más alta. El problema que tenemos los buceadores
es que en caso de accidente, éste puede ser grave. Las
estadísticas de DAN Internacional hacen estimar que aproximadamente
el 10% de los accidentes de buceo son mortales y esta es la razón
por la cual hay que prestar gran atención a la prevención.
¿Está bien cubierta
en España la asistencia sanitaria a los buceadores accidentados?
Por lo que hace referencia a los Centros de Medicina Hiperbárica
la red española es excelente. Sumemos los Centros afiliados
al CCCMH (Comite Coordinador de Centros de Medicina Hiperbarica),
más las cámaras hiperbáricas instaladas en
hospitales militares, más dos hospitales civiles que por
razones de su incumbencia no desean afiliarse al CCCMH; el resultado
es que existen Centros de Medicina Hiperbárica estratégicamente
situados a lo largo de todo el litoral, de forma que la distancia
en caso de necesidad nunca será muy grande.
¿El seguro del Club o del
Centro de buceo y el del buceador se comunican, son solidarios?
De hecho son dos actividades complementarias pero que cubren situaciones
diferentes. Es decir, los Centros de Buceo deben tener seguros
de Responsabilidad Civil que cubran los daños a terceros
y sobretodo garanticen indemnizaciones como resultado de las demandas
que puedan recibir. Pero la asistencia médica de los buceadores
accidentados depende exclusivamente de los seguros individuales
de cada uno. Este es un malentendido que a menudo provoca dudas
y a veces confusiones importantes. No hay ningún seguro
de buceo de club que cubra por extensión los accidentes
médicos de los buceadores, es decir cada buceador debe
tener su cobertura individual y el club puede ofrecerle unas coberturas
que se subscriben en el mismo club, pero no existe ningún
seguro como resultado del cual estén cubiertos todos los
accidentes que sufran sus clientes.
Existe una Red Internacional de
Centros de Urgencia.¿En España, dónde se
encuentran estos centros DAN?
DAN-EUROPE no tiene en España centros médicos propios
sino que recomienda los centros públicos y privados de
solvencia reconocida existentes en cada país o localidad.
En España lo que DAN-EUROPE recomienda es en principio
dirigirse a los centros de Medicina Hiperbárica afiliados
al CCCMH, puesto que es una garantía de calidad y de que
estos centros tienen unos protocolos similares, se actualizan
y modernizan regularmente, como lo requiere la investigación
y actualización en Medicina, y son de solvencia y seriedad
reconocida. La ubicación de los centros puede ser consultada
a través de la página web del CCCMH cuya URL es
http://www.CCCMH.com. Pero el accidentado es siempre libre de
elegir el centro médico de su preferencia y DAN-EUROPA
nunca pondrá inconveniente alguno en hacerse cargo de la
cobertura de los gastos en tales centros.
¿Por qué en España
hay poco personal médico preparado para las posibles enfermedades,
transtornos y accidentes derivados del buceo?
Esta información no es exacta. CRIS-UTH organiza desde
1980 cursos de Medicina del Buceo, es decir desde hace ya 24 años,
los cuales desde el año 1987 se elevaron a la Universidad
de Barcelona, quien les ha dado soporte académico y desde
hace años gozan del máximo nivel académico,
solamente por debajo de un título de especialidad médica.
La Universidad de Alicante organizó también un MASTER
en Medicina Hiperbárica hace unos años, y la Universidad
de Santiago de Compostela ha realizado algunos cursos superiores
de Medicina de Buceo.
Hay actualmente en España más de 200 médicos
con título superior de Medicina Subacuática e Hiperbárica.
El problema está en que algunas personas y muchas instituciones
prefieren seguir contratando médicos de su esfera de relaciones
a pesar que no posean esta titulación. Es decir, conceden
su confianza a médicos de la propia institución
a los cuales se les supone conocimientos de Medicina Subacuática
a pesar de no haber realizado estudios superiores
Si ocurriese que un buceador que
no lleva boya tiene un accidente con un barco ¿Quién
tiene la responsabilidad? ¿Le cubriría el accidente
su seguro de buceo o el del barco que le arrolla?
Esta es una situación delicada que no puede generalizarse.
Estos casos deben ser estudiados individualmente. Algunas compañías
aseguradoras excluyen las coberturas cuando el accidentado ha
cometido infracciones o no respeta al pie de la letra los estandares
de la propia institución.
No es este el caso de DAN-EUROPE que no tiene ningún tipo
de exclusión relacionada con la práctica del buceo
con la sola excepción de la actividad profesional de extracción
de coral rojo. En DAN-EUROPE no hay ninguna limitación
relacionada con el tipo de actividad o titulación que se
posea. En algunos casos el seguro de la embarcación puede
ser que cubra también bajo el concepto de Responsabilidad
Civil las lesiones causadas por atropello. De nuevo lo que ocurre
con las embarcaciones es muy parecido a lo que ocurre con los
automóviles. Es importante leer con detención la
letra pequeña de las pólizas que se suscriben en
cada caso.