MEDICINA
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Medicina hiperbárica en España
 

Como buceadores estamos familiarizados con el término Medicina Hiperbárica o Subacuática pero hay cierta confusión en torno a este asunto. En esta breve sección intentamos aclarar qué se entiende por Medicina Hiperbárica y cual es su situación en España.

En nuestro país la legislación vigente, el Real Decreto 183/2008 por el que se determinan y clasifican las especialidades en ciencias de la salud (Ley de Especialidades Médicas) no reconoce la medicina hiperbárica o subacuática como una especialidad médica. Es decir, un médico en España no puede realizar su MIR en esta especialidad como lo haría, por ejemplo, si quiere ser especialista en ginecología, en cardiología o en otras tantas especialidades reconocidas.
Los médicos que desean trabajar en este ámbito, una vez que han conseguido cualquier otra especialidad, pueden optar a ciclos formativos que les acredita como “facultativos con formación en medicina subacuática”. Son titulaciones superiores equivalentes a Master o Diplomas de Postgrado. Ej. Master en Medicina Subacuática e Hiperbárica con entrenamiento en Cuidados Intensivos y Reanimación.

No obstante, la medicina hiperbárica requiere que los profesionales que la ejercen posean una elevada capacitación por lo que es paradójico que esta disciplina no se encuentre regulada por los mismos principios que afectan a otros campos de la medicina.
En la sanidad militar española existe el Curso de Medicina Subacuática e Hiperbárica y se imparte en el Centro de Buceo de la Armada, en Cartagena. En la sociedad civil son pocos los hospitales que cuentan con una unidad de medicina hiperbárica.

Este tipo de instalaciones permiten los tratamientos de accidentes de buceo en cámaras hiperbáricas que consisten en mantener al paciente a una presión parcial de oxígeno superior a la alcanzada si respirarse oxigeno puro a presión atmosférica. Algo que en principio parece tan sencillo puede complicarse por diversas razones: no se acierta con el diagnostico, se retrasa el inicio de tratamiento, los protocolos ideales no pueden ser aplicados por razones logísticas, la falta de mantenimiento de las instalaciones dificulta los tratamientos, existen dificultades para contar con técnicos especializados o con el personal sanitario a disposición, etc.
Con el fin de poner un poco de orden en este sector se creó en España en 1988 el Comité Coordinador de Centros de Medicina Hiperbárica, conocido también por sus siglas CCCMH. Es una asociación civil sin ánimo de lucro cuyo objetivo es unificar criterios médicos y coordinar a los diferentes centros que utilizan cámaras hiperbáricas destinadas tanto a la asistencia de pacientes como a la docencia o la investigación.

Los centros que desean pertenecer a este comité deben cumplir determinados requisitos que garantizan la seguridad de la instalación y la buena praxis de sus profesionales.

Otro campo importante relacionado con este tema es la expedición de Certificados Médicos de Buceo. Para participar en un curso de buceo, es imprescindible presentar un certificado médico que autorice expresamente al alumno para la práctica del submarinismo. Este documento puede ser emitido por cualquier facultativo colegiado, independientemente de la especialidad médica que tenga. Sin embargo, existen médicos que, con buen criterio, prefieren no firmar este tipo de certificados, ya que no conocen con detalle los riesgos asociados a ambientes hiperbáricos en inmersión ni las diversas y abundantes contraindicaciones médicas que tiene el buceo.

Por este motivo, las distintas administraciones españolas exigen que los certificados médicos de buceo sean emitidos por facultativos con formación en medicina subacuática. De manera que la firma del doctor debe acompañarse con su número de colegiado y una coletilla que indique su formación postgrado en este campo.
Es frecuente que médicos deportivos, neumólogos, otorrinolaringólogos y otros especialistas se sientan atraídos por estos cursos de formación en medicina hiperbárica, pero también cualquier otro médico que sea submarinista y que esté interesado por la fisiología del buceo puede acceder a ellos.

 

 

 
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