El
Censo de la Vida Marina exploró nuevas áreas
y nuevos ecosistemas, descubriendo nuevas especies
en nuevos lugares", dijo Patricia Miloslavich,
de la venezolana Universidad Simón Bolívar,
una de las científicas que dirigieron la investigación
y encargada de los estudios regionales. "Hasta
ahora, la mayor parte de esta información estaba
dispersa o no estaba disponible excepto en un plano
muy local. Ahora se reúne por primera vez toda
la información conocida para crear una base
de conocimientos sobre la vida en los océanos".
Unos 360 científicos evaluaron, analizaron
y presentaron sus conclusiones en una serie de documentos
publicados la primera semana de este mes en la revista
PLoS ONE, de acceso libre a través de Internet.
Las aguas de Australia y Japón poseen la mayor
diversidad biológica, promediando casi 33.000
formas de vida, según el Censo. Las aguas del
océano Pacífico que bañan China,
así como el mar Mediterráneo y el Golfo
de México, constituyen las áreas con
más variedad de especies conocidas.
La cantidad total de especies no guarda relación
co
n
la abundancia de biomasa marina ni con la productividad
de una región en particular, destacó
Miloslavich. El estudio solamente se centró
en la biodiversidad, identificando los diferentes
tipos de especies halladas en las 25 regiones.
Sólo
el 2% de famosos
El Censo descubrió que los animales más
conocidos, como las ballenas, los leones marinos,
las focas, las aves acuáticas, las tortugas
y morsas representan entre 1% y 2% de todas las especies.
Otra sorpresa es que hay muchas especies endémicas,
aquéllas que solamente se encuentran en una
región particular del océano, en sus
aguas de origen, afirma el autor principal del estudio,
Mark Costello, del Laboratorio Marino Leigh, en la
neocelandesa Universidad de Auckland. Las regiones
relativamente aisladas de Australia, Nueva Zelanda,
la Antártida y Sudáfrica poseen la mayoría
de las especies endémicas. Los científicos
especulan con que estas áreas pueden haber
sufrido menos extinciones a raíz del enfriamiento
producido hace miles de años, durante la última
glaciación. Alrededor de la mitad de las especies
marinas de los océanos en Nueva Zelanda y la
Antártida solamente pueden hallarse allí.
Las especies más cosmopolitas son las más
pequeñas y las más grandes: las algas
y las aves y mamíferos marinos, que pasan sus
vidas atravesando los mares. El pez víbora
(Chauliodus sloani) se encuentra en más de
la cuarta parte de los océanos.

El
Golfo de México
También resultan asombrosas las variaciones
entre las regiones. Los peces representan 28% de las
especies del Atlántico occidental tropical
y del sudeste de Estados Unidos, pero solamente entre
3% y 6% del Ártico, la Antártida, el
Báltico y el Mediterráneo. Según
Miloslavich, el Golfo de México también
es un punto clave en materia de biodiversidad: más
de 8.300 especies viven en esa región de intensa
producción petrolera.
El 20 de abril se produjo allí el peor derrame
de crudo de la historia, cuando la plataforma de exploración
Deepwater Horizon, que el gigante British Petroleum
(BP) arrendaba a la firma suiza Transocean, sufrió
una explosión y, dos días después,
se hundió. Apenas a inicios de agosto BP declaró
sellado el pozo, que en julio había tapado
en forma provisional. Los lugares más amenazados
deberían ser protegidos por políticas
específicas, sostuvo Miloslavich. En 2009 se
presentó un inventario completo de las especies
del Golfo, pero las autoridades estadounidenses lo
ignoraron. El derrame de BP fue "muy frustrante",
opinó Miloslavich. Queda el triste consuelo
de que el daño causado pueda medirse con precisión,
dado que hay una base sólida sobre qué
especies existían allí antes del desastre.
Un millón
de especies marinas
Según Costello, aproximadamente 230.000 especies
marinas habrán sido identificadas en octubre,
cuando se complete el Censo. "Hay más
de un millón de especies marinas. Lo que aprendimos
en los últimos 10 años es que lo que
no sabemos sobre los océanos es al menos 10
veces más de lo que sí sabemos",
enfatizó. Se conoce más sobre los océanos
cercanos a Australia, China y Europa, aunque relativamente
poco sobre el Atlántico occidental tropical,
el Pacífico oriental tropical y el Ártico
canadiense. Incluso en regiones muy estudiadas, como
Australia, los científicos estiman que se conoce
apenas 10% de la vida marina de su Zona Económica
Exclusiva. "Debemos ampliar rápidamente
nuestros conocimientos sobre la biodiversidad, no
sea que buena parte de ella se pierda sin siquiera
haber sido descubierta", dijo Miloslavich. Costello
señaló varios estudios recientes que
muestran cómo muchas especies marinas han sufrido
importantes reducciones, en algunos casos hasta de
90%, debido a actividades humanas que las pusieron
al borde de la extinción. Las principales amenazas
son la sobrepesca, la pérdida de hábitat,
las especies invasoras y la contaminación,
según el Censo. Los nuevos peligros son la
ampliación de las "zonas muertas"
--áreas oceánicas con bajo contenido
de oxígeno--, el aumento de las temperaturas
del agua y la acidificación causada por el
cambio climático. "El mar está
en peligro", dijo en un comunicado de prensa
la bióloga Nancy Knowlton, de la Smithsonian
Institution. Las criaturas oceánicas "no
tienen voto en ningún organismo nacional o
internacional, pero están sufriendo y necesitan
ser oídas", agregó.